Coachella | Escenario de empresas emergentes
El domingo 24 de abril, dio por culminada la versión 2022 del festival musical en Indio, California - Estados Unidos. Hablamos de Coachella, un festival que en cuestión de minutos habilitó sus entradas y se agotaron. No solo tuvo un impacto positivo para el turismo y la economía del lugar, sino que tras dos años de no celebrarse por pandemia, demuestra lo influyente que es la realización de un evento de esta magnitud para las grandes marcas y por supuesto para las empresas emergentes que, cada vez más, dicen presente.
Escenario de empresas emergentes
La música en vivo ya no es sólo para escuchar. Los asistentes de los festivales de música constantemente desean vivir nuevas experiencias. De esta manera se abren las puertas a las innovaciones de las empresas emergentes y así la oportunidad de mostrar sus 'apps' de pago, móviles y sensoriales.
La economía y el número de visitantes impulsan los festivales de música, como un nicho importante que ya ha comenzado a enfocarse en las nuevas empresas. El objetivo es claro, diferenciarse y brindar servicios que deleiten a los asistentes. Logrando un efecto en cadena para que los promotores de estos eventos cada vez se esfuercen más por innovar, creando proyectos que sus contrapartes tradicionales no pueden brindar.

Y es que disfrutar de la música ya no se trata solo de comprar entradas, beber cerveza y ver espectáculos. El público interactúa a través de sus dispositivos móviles sin tener que pararse frente al escenario. Además, incluso antes de salir de casa, comienzan a usar aplicaciones relacionadas con los eventos.
El Coachella inmersivo
Un festival como Coachella por ejemplo, resulta especialmente atractivo en medio de la lucha por el interés de estos diversos públicos. Allí el público es un prisionero, toda su atención está centrada en lo que ve. No es como estar en la calle, donde hay demasiados estímulos visuales.