Grado de Inversión
El grado de Inversión de un país, se deriva de un riguroso estudio sobre las condiciones sociales, políticas y económicas. Todos estos elementos, permiten ubicar el riesgo del emisor en una escala internacional, para determinar, de alguna manera, el costo de su endeudamiento.
Y es que cuando el grado de inversión pública se ve comprometido, también está en riesgo la del sector privado.
Para entenderlo de alguna manera, suponga que hoy un país emite en los mercados internacionales unos bonos al 4.5%, con un plazo de 20 años. Si se pierde el grado de inversión, dicha tasa puede subir, según el riesgo país, 100 puntos básicos (1%) o más, afectando toda la curva de deuda que cotiza en el mercado secundario. Así que ese 4.5% mencionado, puede irse a un 5.5%, por dar un ejemplo.
La confianza inversionista, se determina por la salud económica de un país. Los factores económicos son los que más se observan a la hora de calificar. Los agentes encargados de esta labor evalúan básicamente el PIB (producto interno bruto), el recaudo tributario y el gasto para funcionamiento e inversión. Y en los mismos informes se relacionan los factores que deterioran o mejoran la nota.
La crisis generada por la pandemia ya suma 14 meses y trajo consigo el cierre temporal y/o definitivo de innumerables negocios. Por ello ha limitado drásticamente varios sectores de la economía.